TERCERA GUERRA CON FRANCIA 1536-1538
Con la muerte del duque de Milán Francisco Sforza en 1935 sin descendencia, su ducado pasaría a ser disputado por Francisco y Carlos, lo que conllevaría a una escalada bélica que terminaría en la tercera guerra entre Francia y España.
Francisco ya le había demandado por carta a Carlos que pretendía el ducado de Milán para uno de sus hijos, que se casaría con la viuda de Sforza. Carlos pretendía cambiarlo por su viejo anhelo, el ducado de Borgoña, a lo que Francisco se negó.
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Alfonso de Avalos, marques del Vasto |
Carlos a su llegada a Roma pronunció un discurso en español demoledor contra Francisco. Denunció que las tropas francesas estaban ocupando Saboya, mostró la correspondencia de este con Barbarroja incautada en la Goleta, y el comunicado de guerra realizado por representantes galos en Burgos. Por todo esto retó a Francisco en un duelo personal para evitar derramamiento de sangre, siguiendo en su discurso con el mensaje “quiero la paz, quiero la paz”. Francisco respondería por carta al Papa aceptando el duelo, sabedor de que este no se realizaría.
INVASIÓN DE LA PROVENZA
Seguidamente Carlos había preparado un ejército para la guerra que se llevaría a cabo. Se trasladaría de Roma a Génova con las tropas españolas, italianas y alemanas. Se dirigiría al norte a la ciudad de Asti, frontera entre los ducados de Saboya y Milán. Desde ahí realizarían incursiones hacia Turín, aunque el plan de Carlos era el de invadir Francia por la Provenza.
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Montmorncy, condestable de Francia |
Tras de sí dejaba una tremenda devastación de su ejército, con la pérdida de miles de vidas, entre ellas la del veterano riojano de 80 años Antonio Leyva. Volvieron por la costa siendo embarcados en Niza por Doria para llevarlos a Génova.
En enero de 1537 Francisco en el Parlamento Frances vuelve a reivindicar Flandes, Artois y Charolais para la la corona francesa. Esto provoca que se reúna un ejército en Flandes para ante la previsible contienda. Pero de nuevo jugaron un papel esencial "las damas", ya que María de Hungría que era la gobernadora de Flandes era hermana de la reina Leonor de Francia. Ellas comenzaron a negociar y acordaron una paz por diez años que seria luego ratificada el siguiente año en la Paz de Niza, ante el papa Pablo III.